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| fuente: atusalud.latina.pe |
Es
una de las causas más recurrentes en el ser humano, no suele tener períodos
largos, pero es importante prevenirla y también tratarla.
Se
define como el aumento del número de veces en las que un menor evacua
habitualmente. Las heces son blandas y acuosas, “aclarar que en el caso de los
lactantes si ellos evacuan más veces de lo habitual que es entre ocho a diez, es
necesario recurrir al especialista”.
¿Cuáles
son las causas?
Esta
infección puede ser causada por bacterias, parásitos o, por la ingestión de
ciertas comidas, bebidas o antibióticos.
Si
hablamos de una infección vírica el que más predomina es el rotavirus (virus
que provoca las gastroenteritis infecciosas infantiles) generalmente en los
menores de cinco años este causa; diarrea, vómitos, fiebre y malestar general.
Esta infección bacteriana es producida por Escherichia coli, salmonella o
estafilococo, y produce malestares estomacales acompañados de retorcijones, sangre
en las heces, dolor de cabeza y fiebre alta.
Las
infecciones parasitarias pueden causar la diarrea, por ejemplo la giardiasis, (un parásito microscópico que vive en los
intestinos), provoca hinchazón, diarrea, gases, y heces grasientas. En su mayoría
los parásitos se contagian con facilidad y el tratamiento incluye medicamentos
especiales, en caso de sospecha se recomienda llevar al pequeño al pediatra.
¿Cómo
debemos tratar la diarrea?
En
lo posible, se debe evitar que el menor tenga deshidratación, ya que las infecciones estomacales generan perdida
de líquidos y sales del cuerpo, es por eso que el niño tiene que ingerir
bastante líquido.
En
el caso de los bebes deben recibir con
mayor frecuencia el pecho de la madre, y si vomita todo lo que ingiere o si la
diarrea es severa (deposiciones líquidas cada dos horas o más), es aconsejable
llamar al pediatra, el especialista recetara las sales de rehidratación oral
(estas son adquiridas en las farmacias), además dará un tratamiento adecuado de
acuerdo a la edad del menor.
Los
líquidos endulzados como; gaseosas, bebidas, o agua azucarada, no son
recomendables porque contienen azúcar, este lleva el agua a los intestinos y empeora la
diarrea.
Dependiendo
como este el niño el pediatra recomendara una dieta adecuada en base a
plátanos, arroz, compota de manzanas y pan tostado , alimentos compuestos por
carbohidratos complejos (como arroz, trigo y cereal), así como carnes magras,
yogurt, frutas y verduras, que si son seguros.
Algunos
menores se niegan a comer, no hay que preocuparse ni obligarlos, lo más
importante es que el niño este hidratado, y a medida que transcurren los días
el apetito ira mejorando.
¿Cuándo
acudir al Pediatra?
Si
la diarrea persiste más de 24 horas, o en caso de que vomite, presente signos
de deshidratación, apenas pueda beber, este con los ojos hundidos, la boca
seca, disminución de la orina, si presenta sangre en las heces, o tiene fiebre
alta mayor a 38 grados, cual quiera de estos síntomas debe ser tratado por el
especialista.
Recomendaciones
Los
buenos hábitos higiénicos son importantes en la familia, este procedimiento contribuye
y evita las diarreas además de ciertas infecciones. Generalmente estas son producidas por contagio ya que todo lo que manipulan los menores siempre es llevado
a la boca.
Para
eso debemos tomar en cuenta lo siguiente:
- - Después de que utilicen los niños el baño deben lavarse las manos.
- - Antes de preparar las comidas y consumirlas.
- - Tener limpia la casa son algunos de las rutinas que los padres deben enseñar a los pequeños.
FUENTE
: Dra. Katherine Zurita Viveros
Medico General
